Tal vez te encuentres en un momento de pérdida y te sientas confundido, no comprendes porque te pasan ciertas cosas. En este artículo te voy a explicar cuáles son las Fases del Duelo y te contaré a qué llamamos Duelo.
¿Qué es el Duelo?
Es la manera en que una persona reacciona ante la pérdida, ya sea de un ser querido (persona, animal) de una relación, de un trabajo, de una parte del cuerpo o movilidad…
Hay que tener en cuenta que este proceso no sólo se limita a componentes emocionales, sino también los hay fisiológicos y sociales. La intensidad y la duración de este proceso será proporcional a la dimensión y significado de la pérdida.
¿Cómo aparece el Duelo?
El Duelo se manifiesta en cinco fases, aunque no siempre se suceden en orden, alguna hay veces que se repite, e incluso, alguna no se produce nunca.
Quiero detallar que lo que va a influir a la hora de que se alarguen las fases o se den unas y otras, es el tipo de pérdida que vivamos, pues no es lo mismo una pérdida que vamos procesando que la que llega sin que lo esperemos, de repente, como tampoco es lo mismo que perdamos algo a lo que estábamos muy ligados, que nos gustaba mucho, que nos hacía sentir bien, que algo que no era tan importante para nosotros.
Las cinco fases del Duelo
- Negación: es una reacción que se produce de forma muy habitual inmediatamente después de la pérdida, con frecuencia aparejada a un estado de shock o embotamiento emocional e incluso cognitivo. No sólo hablamos de negar el hecho de que se haya producido esa pérdida, sino se puede dar también la negación en la importancia de la pérdida o de su carácter definitivo.
- Ira: el fin de la negación va asociado a sentimientos de frustración y de impotencia con respecto a la propia capacidad de modificar las consecuencias de la pérdida. Dicha frustración conlleva a su vez a la aparición del enfado y de ira, como sucede en general y no sólo durante el duelo. Durante esta etapa la persona busca atribuir la culpa de pérdida a algún factor, como puede ser otra persona o incluso uno mismo. El proceso de duelo implica la superación de la frustración y del enfado. No sólo nos vamos a enfadar con la circunstancia en sí sino también hay veces que nos enfadamos con la vida, con lo que nos rodea, hay que tener cuidado con esto porque podemos entrar en una actitud nociva ante lo que nos ocurre.
- Negociación: en esta fase la persona guarda la esperanza de que nada cambie y de que puede moverse de algún modo en la situación que le acontece. Para que se entienda mejor voy a poner un ejemplo: a una persona le han diagnosticado una enfermedad terminal y en este caso intenta explorar opciones de tratamiento a pesar de saber que no existe cura posible, o quienes creen que podrán volver con su pareja si empiezan a comportarse de otra manera.
- Depresión: en este periodo la persona empieza a asumir la realidad de la pérdida, y ello le va a generar sentimientos de tristeza y de desesperanza junto otros síntomas típicos de los estados depresivos, como el aislamiento social, la falta de interés, la apatía… Esta fase es quizás una de las más duras porque al poner conciencia en la pérdida al principio sientes que la vida no tiene sentido, pero tranquilo/a porque con la comprensión y guía apropiada llegas a la fase de aceptación.
- Aceptación: da un estado de calma asociado a la comprensión de que la muerte y otras pérdidas son fenómenos naturales en la vida humana.
Cómo recorrer el camino del Duelo
Cuando uno empieza a recorrer el camino del Duelo se encuentra muy desamparado, triste… Por favor no lo recorras sólo acude a un profesional que te comprenda que te guíe y que te de unas pautas para poder andar por él de una manera sana. Esto no quiere decir que no va vayas a sentir dolor, lo sentirás, pero no lo convertirás en sufrimiento. Si transitas este camino poniendo conciencia en lo que te ocurre y gestionándolo desde el amor a tu persona, éste proceso te convertirá en alguien diferente que cuando lo empezaste, alguien con una actitud más sana.
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